Stephanie Trunzo, Senior Vice President y GM, Oracle Health | 3 de mayo de 2023
El sector de atención a la salud genera 19 terabytes de datos clínicos cada año, lo cual equivale a 4750 películas o a un almacenamiento suficiente para albergar 5,89 millones de fotos.
Entonces, ¿qué se hace con todos esos datos?
Los datos son históricos por naturaleza, por lo que se utilizan para analizar el pasado. Desde el punto de vista temático, ese no es su único propósito, puesto que los datos contribuyen a informar sobre nuestro presente y nuestro futuro. Con los sistemas de información en tiempo real, estamos cada vez más cerca de poder aprovechar los datos en el momento presente. Nuestros ingenieros han transmitido datos a una velocidad de 1,84 petabits por segundo, casi el doble del tráfico global de internet por segundo. No obstante, el mayor valor que nos aportan los datos es la capacidad de ver hacia el futuro.
Ningún sector puede beneficiarse más del impacto que tienen los datos sobre las personas que el sector de atención a la salud. Los avances tecnológicos nos permiten conocer nuestro estado de salud presente y futuro. Hasta que no hayamos cribado y aprovechado todos estos datos históricos para ayudarnos a analizar el presente, y hasta que no hayamos encontrado patrones y avanzado en algoritmos que informen con precisión acerca de las decisiones clínicas, la vigilancia de enfermedades y las políticas de salud pública, no podremos confirmar que los datos hayan cumplido con su propósito.
Por desgracia, aún no hemos llegado a ese punto. Hasta ahora, los datos se han orientado más al apoyo de los sistemas que al apoyo de los seres humanos. No podremos avanzar en el camino hacia el futuro de la salud a menos que redirijamos los datos directamente hacia las personas, puesto que gracias a su debido uso podremos pasar de una prestación asistencial de carácter reaccionario a un modelo de salud informado. Este salto de los datos al conocimiento es una elección que debemos tomar hoy si queremos transmitir información a nuestros homólogos del mañana.
Imagínese que se enfrenta a esta situación: un accidente o lesión le lleva al departamento de urgencias (DU). El diagnóstico por imagen realizado en el DU da lugar posteriormente a una visita de seguimiento o revisión con otros profesionales asistenciales que en este caso no tienen ningún registro de su visita al DU. Como paciente, resulta verdaderamente frustrante tener que realizar papeleos en lugar de centrarse en el cuidado de la propia salud y tener que guardar registros de distintas clínicas y centros de salud cuando lo único que se busca en este momento es recibir la mejor atención y confort posibles.
El paciente no se beneficia de este proceso puesto que no dispone de la experiencia o los conocimientos necesarios para agregar datos a través de una infinidad de sistemas. Como consumidores de atención a la salud, se espera que sea el propio sistema quien transfiera esa información al punto de cuidados. Sin embargo, los médicos tampoco sacan ningún beneficio puesto que pasan más tiempo reintroduciendo datos que atendiendo a los propios pacientes. Al final, el sistema de atención a la salud termina ignorando a las personas que más debía proteger.
“Hasta que no hayamos cribado y aprovechado todos estos datos históricos para ayudarnos a analizar el presente, y hasta que no hayamos encontrado patrones y avanzado en algoritmos que informen con precisión acerca de las decisiones clínicas, la vigilancia de enfermedades y las políticas de salud pública, no podremos confirmar que los datos hayan cumplido con su propósito".
¿Por qué las tiendas tienen acceso a nuestro historial de compras pero los profesionales asistenciales no pueden acceder a nuestra historia clínica de salud? Los datos relativos a la salud son un componente esencial con gran repercusión sobre nuestras vidas. La respuesta es que nuestros datos médicos pasados residen en sistemas de salud fragmentados que siguen utilizándose hoy en día aunque continúan permaneciendo desconectados, por lo que son inutilizables a pesar de su gran relevancia en lo que respecta a nuestra salud.
La interoperabilidad de los datos de salud es la clave necesaria que puede abrirnos un sinfín de posibilidades, como la colaboración analítica entre sectores y en la nube, la innovación tecnológica y clínica y, en última instancia, la mejora de los resultados y experiencia de los pacientes. La interoperabilidad permite un intercambio de información seguro y procesable, de modo que los resultados de imágenes obtenidos durante una visita a urgencias pueden servir de base para la atención recibida durante una cita de revisión a un paciente.
El intercambio de información entre sectores, por ejemplo, los datos anonimizados del sistema de salud utilizados en las ciencias biosanitarias, puede propiciar avances en la investigación, la genómica, la gestión de enfermedades y la medicina de precisión, promoviendo en última instancia experiencias y resultados positivos tanto para los profesionales asistenciales como para los pacientes. No tenemos por qué olvidarnos de nuestros datos del pasado cuando realmente ostentan el gran potencial de alimentar nuestro futuro.
Así que, con todos los datos de salud que hemos generado, ¿cómo podemos utilizarlos de la mejor manera con las personas?
En primer lugar, debemos cambiar intencionadamente la perspectiva que tenemos de los datos hacia las personas:
A este respecto, Oracle Health no busca sino ser el motor impulsor de ese cambio. Entendemos que es necesario cambiar la perspectiva de la atención a la salud de los sistemas hacia las personas a medida que mejoramos nuestro conocimiento acerca de los datos, no solamente para crear datos alineados e interconectados, sino para convertir nuestros datos históricos en conocimientos reales y prácticos.
Si podemos recibir recomendaciones de prendas de ropa en línea, ¿por qué es tan difícil obtener recomendaciones sobre nuestra salud? ¿Por qué no podemos aprender y aprovecharnos de la experiencia de otros sectores para crear el mismo potencial inspirado en los datos que tanto necesita el sector de atención a la salud?
La buena noticia es que esta tecnología ya existe y que el sector de la salud está tomando un impulso sin precedentes. Este impulso no se focaliza únicamente en emprender una carrera hacia la solución, sino más bien en ser una puerta de entrada a la colaboración dentro del sector donde podemos trabajar juntos para aprovechar al máximo nuestros recursos a nivel individual y nuestras mejores competencias técnicas.
En Oracle Health, creemos que podemos aportar algo único a este gran ecosistema a través de la colaboración dentro del sector. A través de nuestro trabajo con gobiernos e instituciones de investigación de todo el mundo, hemos aplicado aprendizajes compartidos y una misma visión y tecnología para luchar contra enfermedades como la COVID-19 y el VIH.
Pero no podemos hacer esto solos. Ahora que ya hemos superado la pandemia con una mayor determinación para gestionar la atención a la salud, se necesitan socios y es fundamental crear un ecosistema abierto en el que las historias clínicas sean legalmente accesibles y estén unificadas independientemente del lugar en el que los pacientes reciban atención médica. Las organizaciones deben modificar la forma en que desarrollan sus soluciones para permitir la interconexión de datos entre distintos socios y organizaciones.
Con el poder de la tecnología, es posible generar información práctica que transforme los sistemas de registro clínico en sistemas de inteligencia y que los datos, a su vez, puedan ayudar a los médicos a detectar enfermedades con mayor rapidez. Cuando alcancemos la fase en la que hagamos uso de la tecnología, como la inteligencia artificial y el modelado de datos, para prever el futuro, será cuando realmente experimentemos el cambio de un modelo de atención sanitaria reactiva a un modelo de atención proactiva que ayude a las personas a llevar una vida más sana. Los datos históricos de salud procedentes de inventarios, investigaciones, del "Internet de las cosas", dispositivos médicos o historias clínicas electrónicas que han quedado atrapados en sistemas o en papel y no se han utilizado plenamente son una mina de oro de información a la espera de ser transformada en información de gran relevancia.
La combinación de datos históricos anonimizados, datos actuales y datos en tiempo real hace que el modelo de información predictiva sea más seguro y nos ayude a revelar información sobre la salud de un paciente. Basta con pensar en los datos recopilados de pacientes con cáncer, que tienen en cuenta disparidades ambientales, predisposiciones genéticas, factores demográficos y otras condiciones de salud, utilizados para predecir un riesgo específico de cáncer en una persona que cumple esos criterios. Del mismo modo, los datos anteriores, la secuenciación genómica y la medicina de precisión basada en la inteligencia artificial pueden permitir a un profesional asistencial diseñar un plan de tratamiento personalizado para ese paciente.
Gracias al gran avance de las tecnologías, es posible obtener, agregar y analizar datos de todas las áreas de atención a la salud, como el área clínica, de gestión de ingresos, de salud pública y de capital humano, entre otras. Por ejemplo, los hospitales podrían anticipar el flujo de pacientes y la capacidad de los recursos en la temporada alta de gripe para mejorar la programación, la eficiencia y la experiencia tanto de los pacientes como del personal.
Cuando adoptamos un enfoque global en lo que respecta a los datos, se nos abre un mundo de grandes posibilidades. Considerar el sector de atención a la salud desde una perspectiva global acerca el punto de atención a las personas, que a su vez está impulsado por datos y una experiencia clínica a nivel global. Si no tenemos en cuenta esta perspectiva a nivel global, la mitad de la ecuación está perdida. Es necesario unificar los datos históricos a nivel mundial, no solo de unos pocos países, a fin de poner a disposición de los médicos un verdadero tesoro a nivel informativo y de datos con el que actualmente no contamos.
La atención a la salud vive un momento crucial, tratando de pasar del pasado al presente y adaptándose al futuro en un proceso en el que los datos impulsan esta transformación. Estamos creando una cartera que combina la sólida y segura base de Oracle en lo que respecta a la tecnología de datos, la infraestructura en la nube, las aplicaciones y las herramientas analíticas con el conocimiento clínico y la experiencia real de atención a la salud de Cerner.
Los productos mostrados son ejemplos de lo que se ha proporcionado en casos específicos. Cada producto o dispositivo médico está diseñado para cumplir con las normativas de la geografía donde se utiliza. Sin embargo, no podemos garantizar su disponibilidad o cumplimiento en otras regiones específicas. Las adaptaciones locales pueden ser necesarias para satisfacer los requisitos regionales.